Lo que yo considero la barbarie representada en un teatro greco de los años de la Roma dominante y represiva de sus Emperadores. Sin duda alguna hoy en día lo estamos reviviendo con el: Ultímate Fighting Championship. Esta especialidad de lucha o combate que aglomera una serie de disciplinas y tradiciones de combate, solo me convence que es un espectáculo de feudos. Lo digo porque es un circo que tiene muchos seguidores hambrientos de violencia, golpes y patadas. Para colmo, es un espectáculo que tiene más promoción que las peleas tradicionales del puño, o sea el boxeo. Este deprimente espectáculo solo demuestra el ego greco-romano de satisfacer el placer de ver a otro humano, siendo golpeado y hasta herido. El U.F.C es un espectáculo creado con el único fin de satisfacer el morbo antideportivo de los violentos del boxeo. Digo esto, ya que hay infinidades de personas, que no contentos con el sano deporte del boxeo, buscan una alternativa mas violenta de ver y presenciar. No quiero tampoco transmitir una xenofobia U.F.C, solo dejo claro que cualquier violencia que se trate de implementar como deporte, e independientemente del país que lo promocione; no se debe aplaudir. Es un deporte que tiene como norma la sumisión del contrario, no importa como sea. Siempre y cuando sea a golpes, patadas, estrangulamientos o llaves. No cabe duda para mí, como ser pensante primero y como docente después; que ninguna disciplina que fomente la violencia, se puede llamar deportiva. He visto deportes como el boxeo, el boxeo Tailandés, el Sumo, el Karate, el Taekwondo. Entre muchos otros, y ninguno de ellos se ha salido de un esquema de tradición y normas, todas están dirigidas al respeto del adversario en combate. Detrás de este espectáculo también existen una gran cantidad de promotores, que solo buscan enriquecerse con un bobo con músculos y fuerza para destrozar al contrario. Sin duda la mafia que rodea este violento escenario, no cesará hasta que pase al primer lugar del espectáculo televisivo. Tratando de desplazar al boxeo de la mente de los fanáticos de este deporte, y tratar de incluirlos en esta violencia comercial. Los beneficios económicos son incalculables, es por esto que será difícil erradicar esta violencia de muchos países. Con el deporte y la salud presente en nuestras mentes, me despido hasta el próximo “Entre tres y dos, con el deporte”.